
Aprovechando que comenzamos añada, algún carajillo ha decidido que era el momento idóneo para pasar la "ITV" de cara a estar en las mejores condiciones para la nueva temporada que se nos echa encima. Realizar una prueba de esfuerzo es algo que puede redundar en una mejora de nuestro rendimiento, si sabemos aplicar los parámetros extraídos de la misma en nuestros entrenamientos, pero, además, permite evaluar nuestro estado de salud y detectar cualquier anomalía o patología cardiovascular antes de que sea demasiado tarde. Desde nuestro humilde punto de vista, constituye un saludable hábito que recomendamos, máxime cuando normalmente nos gastamos pingües partes de nuestro presupuesto ciclista en cosas bastante más accesorias. Queremos agradecer al Centro de Alto Rendimiento Millennium su trato e interés.









¡Aquellos locos con sus viejos cacharros!. En 1985 el equipo francés Renault comenzó a realizar esta suerte de "prueba de esfuerzo". Obsérvese el "ordenador portátil" al que está conectado Pascal Jules. De esta imagen...