miércoles, 29 de abril de 2009

Arturo Ariño y Sebas Tamayo acarician la victoria




Arturico “El Borrajas” y Sebas están cada vez más cerca de inaugurar el casillero de victorias esta temporada.

Arturo rozó el poste en el XIII Trofeo Hotel Irache disputado en la localidad navarra de Ayegui. Nuestro carajillo de Utebo se impuso al sprint a un grupo selecto de poco más de veinte unidades. Lástima que por delante llegó, con una escasa renta de tres segundos, Victor Cabedo (Seguros Bilbao). El podium lo completó el hermano del motero Dani Pedrosa, Eric Pedrosa (Lizarte).


Cada vez más cerca. Arturico está rozando un triunfo que no tardará en llegar.


Después de este excelente resultado, Arturo Ariño ha tomado parte en los Tres Días de Alava, donde el trabajo realizado para que su compañero Rubén García pudiera adjudicarse la vuelta, no le ha impedido meterse en el Top Ten de la clasificación general final. Arturo se clasificó 6º, 24º y 15º en las tres etapas y 10º en la general.



Gran estado de forma. Sin duda el stage colombiano le ha sentado de maravilla a Arturo. El año que viene nos apuntamos ... si nos dejan en casa ... bueno, ya veremos.

Por su parte, Sebas finalizó en un gran momento de forma la Vuelta a Cartagena. No en vano, tras el despiste de la segunda etapa que le costó sus aspiraciones a la general, acabó décimo en la dantesca etapa que cerraba la vuelta, clasificándose el 34º en la general.

Acabando la Vuelta a Cartagena. Sebas terminó 10º en la etapa que clausuraba la vuelta. El clima, ideal para su catarro.

A continuación, el día 23 de Abril, Día de Aragón, Sebas se presentó en la localidad de Alagón, lugar de partida el Circuito de la Ribera del Jalón, con la intención de regalarle a su padre la victoria con motivo de su cumpleaños. Nuestro carajillo se mostró el más fuerte de la prueba, rodando en solitario la mayor parte de la misma, mas al final recibió la compañía de su compañero Lorenzo Buil y decidieron entrar de la mano en la meta de Calatayud, dando los árbitros la victoria al oscense.



Feliz cumpleaños para el papá de los Tamayo. Sebas tenía una motivación especial el 23 de Abril.


No queremos dejar de felicitar a Joaquín Villalba “El Halcón de Saviñán” por su victoria en el G.P. Valverde. Evidenciando el golpe de pedal que exhibió en la Vuelta a Cartagena, donde logró la 15º plaza en la cronoescalada y la 6º en la última etapa. Villalba, con su triunfo en las calles de Fuencarral, pasa a formar parte del historial de los ganadores de esta clásica que cuenta con nombres tan ilustres como Miguel Induráin u Óscar Sevilla.



"El Halcón de Saviñán" vuela sobre Fuencarral. Villalba se impuso a Sánchez y Pérez en el G.P. Valverde.

viernes, 24 de abril de 2009

Monlora

Nutrido pelotón. Multitudinaria participación en las bodas de plata de la Subida a Monlora.


Hacía más de once años que el que esto escribe no participaba en la Subida a Monlora. Por aquel entonces, el recorrido no incluía la subida al puerto de Santolaria (Sierra Mayor), se solía controlar el ritmo de la marcha con un coche en vanguardia del pelotón y se hacía obligatoria la parada en los avituallamientos. El último de los mismos acontecía en la localidad de Sierra de Luna. Desde allí, una vez la organización estimaba que todos los participantes ya habían dado cuenta tranquilamente de las viandas destinadas a saciar su apetito, se dejaba libre la marcha hasta el Santuario de Monlora. En las primeras ediciones, la disputa de la ascensión era meramente testimonial, por el simple hecho de matar el gusanillo competitivo, pues no había clasificaciones ni premios. En aquellos años, recuerde el lector que estamos hablando de hace más de dos décadas, hubiera supuesto un auténtico disparate. Posteriormente, pese a que la distancia del tramo libre se seguía manteniendo, un trofeo pasaba a distinguir al primero que alcanzaba la cima de ese montículo caprichosamente ubicado en la planicie de las Cinco Villas. Hasta el mismo se acercaban, año tras año, los más afamados cicloturistas especializados en eso de subir cuestas más rápido que los demás. En las últimas añadas, la prueba se hace de manera libre desde la salida y una detallada clasificación denuncia el orden de llegada de cada uno de los participantes.


Azysa-Conor Power. Víctor Hoste capitaneó la escuadra azul en esta ocasión.

El pasado domingo, esta prueba celebró sus bodas de plata con récord de participación. Más de quinientos participantes se dieron cita a las nueve de la mañana en Luna para recorrer los 115 kilómetros que les separaban de la meta sita en los aledaños de la ermita de la Virgen de Monlora que sobre su atalaya de 760 metros de altitud, domina el paisaje desde el año del Señor de 1500, antaño en condición de convento franciscano, hoy como hospedería. Habida cuenta de lo concurrido de la participación, se hacía necesario, nada más salir, alcanzar posiciones de vanguardia para sortear los primeros repechos en una ventajosa plaza dentro del pelotón. Aprovechando la estela de un compañero que iba instando, de una manera graciosa, a los demás a que le dejaran hueco para pasar, íbamos escalando posiciones en el gran grupo. En un momento dado, un cicloturista de avanza edad le recriminó a mi particular ariete la acción, espetándole molesto: “¡Eh!. ¡Tranquilo que esto es una cicloturista, no una carrera!”. Reconozco que ese comentario me hizo pensar durante bastantes momentos de la prueba, aquellos en los que los músculos de mis piernas no reclamaban toda la sustancia de mi riego sanguíneo, sobre quién estaba en el lugar equivocado, aquel señor o nosotros.


Espionaje. Felis se arrimó en la salida a los del Club Ciclista Utebo para ver si se enteraba de la táctica del equipo dominador.

Desde que vio la luz el blog de El Carajillo Alegre, hemos dado cuenta con anterioridad de otra prueba de características similares a la que nos ocupa, ni en aquella ocasión (Pinares de Zuera) ni en ésta, el lector podrá hallar en nuestra reseña la palabra “cicloturista”. Simplemente porque pretendemos, en nuestra modestia, llamar a las cosas por su nombre y Pinares de Zuera o Monlora no son cicloturistas propiamente dichas, desde el momento en que hay clasificaciones y trofeos. Tampoco podríamos calificarlas como “carreras”, dado que las carreras poseen particularidades propias de las que carecen este tipo de eventos ciclistas. Lo que sí está claro, es que creemos que el futuro del ciclismo pasa por este tipo de competiciones. Esto es, una suerte de carrera popular en la que cada ciclista de rienda suelta a su forma de entender el ciclismo, sin limitaciones de tiempo que pudieran penalizarse con el “Fuera de Control”. Además, lo bueno de este tipo de carreras es que si nos va mal, siempre tenemos la socorrida excusa de argumentar que hemos ido a hacerla acompañando a un amigo, generalmente en inferior condición física a la nuestra, durante el recorrido.

Puerto de Sierra Mayor. Felis a rueda de Jimmy siguiendo el ritmo de Víctor.

Por lo que respecta a la edición de este año de la primera “clásica” aragonesa de la temporada, decir que el ritmo hasta Ayerbe fue muy elevado, lo que imposibilitó cualquiera de los numerosos intentos de fuga, excepción hecha del que protagonizó Cera que tendría la mala suerte de pinchar. El puerto de Sierra Mayor seleccionó la cabeza, dejando en vanguardia un grupico de no más de veinte ciclistas que se fue erosionando a medida que nos acercábamos a Biel. A la altura del desvío de Luesia, Serrano se marchó en solitario y administró un breve ventaja durante varios kilómetros hasta que a unos seis kilómetros de Luna, Felis demarró llevándose a su compañero de aventuras, Dani Arnal, con él. Posteriormente, se les uniría Luis Grima para conformar un trío que se presentó a las faldas de Monlora con una exigua ventaja.


El más fuerte. Jimmy, sin duda, fue un justo vencedor.

En este punto, tuvo lugar un hecho insólito. Los lectores de El Carajillo Alegre saben de las dotes adivinatorias del barbastrense Arnal. Pues bien, al comienzo de la ascensión en la que se iba a decidir la prueba, Dani hizo uno de sus acostumbrados vaticinios: “Felis, tira p’alante que llegas”. Por supuesto, Felis, imbuido de la fe y el convencimiento de ese pronóstico, miró hacia arriba y con la mirada fija en la silueta del santuario, recortada sobre el cielo azul de las Cinco Villas, se fue en solitario hacia la gloria. Dani Arnal le había dicho que llegaba y eso era bastante para creer en el milagro. Al principio, su pedaleo era alegre, espoleado sin duda por la arenga de su compañero de escapada, mas en los últimos quinientos metros, un espectador le conminó a que no mirase atrás. Felis hizo caso omiso a la recomendación y observó aterrorizado como una figura azul celeste se abalanzaba sobre él a una velocidad letal. En un esfuerzo sobrehumano, consiguió acelerar su bicicleta 0’2 kilómetros por hora, pero fue insuficiente. Cuando ya acariciaba con la punta de los dedos la curva que era el preludio de la meta, Jimmy pasó por encima de él. Queridos pasajeros de la nave del misterio, ¿porqué extraña razón el poder adivinatorio de Dani Arnal no tuvo efecto en esta ocasión?, ¿posee el Santuario de Monlora misteriosas fuerzas telúricas que le inhiben de su poder de predicción?, ¿conocían ya los antiguos este enclave como un lugar en el que la magia de los videntes es inocua? …
“Felis, tira p’alante que llegas”. Y una ...!. Aquí todavía tenía ilusiones por llegar.

¡Qué miedo!. Esto es lo que venía por detrás.

Del resto de carajillos, diremos que Rubén “Carajillín”, Gerardo y Chemica protagonizaron multitud de intentos antes de llegar a Ayerbe. En esta ocasión, contamos con la colaboración de algún integrante del equipo elite/sub 23 del equipo Azysa-Conor, destacando la actuación del ejeano Víctor Herrero que nos llevó con el cuello estirado durante toda la ascensión a Sierra Mayor.
Víctor Hoste impone su ritmo en Sierra Mayor. La marcheta de Víctor hizo que los ataques fueran estériles.

Clasificaciones.
1º. Javier Mainar “Jimmy”
2º. Sergio Pérez
3º. David Jariod
4º. Luis A. Grima
5º. Felis

15º. Víctor Herrero
21º. Gerardo
31º. Rubén “Carajillín”
100º. Chemica
Curva de meta. Muy importante entrar bien colocado. Felis con la boca abierta. Sin duda, la carrera de la tarde anterior en Cascante supuso un tonificante masaje para sus maltrechas patas.

Gerardo Museeuw culminando la ascensión. Acompañado de un mozo de Carcastillo y seguido de un afamado grimpeur como es Luis Mellado (el de rojo que va entre coches).


Rubén "Carajillín" buscó la escapada. Nuestro presi tomando la curva final.


Chemica va encontrando el golpe de pedal. Pese a que sus múltiples compromisos alteran sobremanera su plan de preparación, nuestro carajillo más popular se dejó ver en varias intentonas.

Nota de El Carajillo Alegre.
El Carajillo Alegre, por medio de su órgano de expresión, el presente blog, desea hacer público que tiene intención de hacer uso de todas las herramientas legales a su alcance para depurar las responsabilidades derivadas de los hechos acontecidos en la Subida a Monlora, el día 19 de Abril del corriente. Entendemos que Don Javier Mainar, más conocido el ambiente ciclista como “Jimmy”, perteneciente al Club Ciclista Utebo, patrocinado por Pretensa-Prenavinsa-Alcanzze-Peyuca S.L.-Adrenalina, es el autor material de los daños y perjuicios ocasionados como consecuencia del adelantamiento de aquel a nuestro carajillo Felis en la carretera que da acceso al Santuario de Monlora sito en el término municipal de Luna (Zaragoza) y que ocasionaron el desprendimiento de las pegatinas del cuadro de la bicicleta de éste. Ante lo cual, requerimos la reparación de las mismas, lo que hacemos saber a todos los efectos oportunos Dios mediante.



Caballito. Serrano va sobrao y celebra la llegada a su estilo. Gerardo lo flipa.

martes, 21 de abril de 2009

Debut de Rubén "Carajillín"

Rubén "Carajillín" da comienzo a su temporada. Debut en tierras navarras de nuestro líder.


A finales de los años noventa, un norteamericano de nombre Gregorio (Greg para los amigos) y apellido con raíces francesas, Lemond, demostró que consiguiendo el objetivo, uno y sumo, de la temporada se obtenía indulgencia plena por el resto de una anodina campaña. Desde entonces, los más insignes campeones del deporte del pedal sobre asfalto siguieron sus pasos, convirtiéndose en cicateros gestores de la clase que atesoraban los músculos de sus extremidades inferiores. Atrás quedaban aquellos héroes hidrópicos de triunfos desde los albores de la temporada hasta el ocaso de la misma.


Aconteció el devenir de ases que racionan sobremanera sus prestaciones previas al gran hito del año. Así, la primera y estelar aparición de los mismos en competición se hace rodeada de la mayor pompa, constituyéndose en el punto de partida de cara a la consecución de la meta que normalmente, en el caso de los primeros espadas, coincide con el mes de Julio en tierras galas.



Venta de Baños. Felis y Larrea durante la ascensión al primer puerto de la jornada.

Este fin de semana, en la localidad navarra de Cascante, tuvo lugar uno de estos hechos: el debut de un insigne ciclista en esta temporada. Coincidió con el estreno de otros dos grandes de la categoría master, Villoria y Chuchín, pero El Carajillo Alegre celebró el primer día de competición de Rubén “Carajillín” en la campaña 2009. Nuestro presidente vitalicio ha decidido esta temporada experimentar una nueva planificación, en cuanto al calendario a disputar se refiere, de cara llegar en el mejor estado de forma a su objetivo de la temporada que no vamos a desvelar para no dar pistas a nuestros rivales. Los esperanzadores resultados del año pasado, con un segundo puesto en Zuera, un sexto en el Trofeo Oscar Llanos y otra sexta plaza en Pinares de Zuera, le hacen ser inconformista de cara al futuro y centrarse en objetivos concretos.



En la fila. Rubén "Carajillín" intenta aguantar en las rampas del puerto de Cervera.


La actuación de “Carajillín” no desentonó, pese a la falta de ritmo de competición, estando atento a los cortes que se produjeron desde el banderazo de salida. Al día siguiente, domingo, tomó parte en la Subida a Monlora, protagonizando varios intentos de fuga con el simple objeto de ir acumulando kilómetros de calidad.



Sprint del pelotón. Yangüas se impone a Felis.


Gerardo tercero en Master-40. Txemi Saizar ganó en Master-40, mientras que Rafita y Gerardo se jugaban la segunda plaza al sprint.


Manager. Carlicos hizo labores directivas en esta ocasión.

lunes, 20 de abril de 2009

Destacada actuación de Diego Tamayo en Nobili Rubinetterie

Trabajando en la escapada. Diego tirando del grupo de escapados que protagonizaron esta edición del G.P. Nobili Rubinetterie. ¿Qué os pensabais que sólo es capaz de estirarnos el cuello a nosotros por la carretera de San Mateo?, pues ya veis que a los profetis también los lleva enfilados.


El sábado Diego participó en el XII G.P. Nobili Rubinetterie que se disputa en la localidad italiana de Arona, puntuable 1.1 en la clasificación de la UCI. Típica corsa italiana con un duro circuito plagado salitas. Diego fue uno de los principales protagonistas de la carrera al incluirse en una temprana escapada, junto con su compañero Sebastien Fountet Fayard. El intento duró cerca de ochenta kilómetros y adquirió tal consistencia que por detrás, uno de los capos, Ivan Basso, movió la carrera para llevar a unos cuarenta corredores hasta los escapados. El resto del pelotón ya no tuvo ninguna opción a disputar la prueba que constaba de 190 kilómetros.

Nuestro carajillo Dieguechu, perdió contacto con los primeros en la última ascensión. No obstante, esto último no empaña una destaca actuación que le da un aporte de moral y optimismo de cara a su próximo compromiso, uno de los más importantes de la temporada, El Giro del Trentino que comienza el próximo miércoles.



Clasificación:
1º. Grega Bole (Slo) Amica Chips - Knauf 4.31.00 (41.336 km/h)
2º. Fortunato Baliani (Ita) CSF Group - Navigare
3º. Andriy Grivko (Ukr) ISD
4º. Daniele Callegarin (Ita) Centri della Calzatura a 0.17
5º. Gabriele Bosisio (Ita) LPR Brakes - Farnese Vini
6º. Francesco Failli (Ita) Acqua & Sapone - Caffe Mokambo
7º. Pasquale Muto (Ita) Miche - Silver Cross - Selle Italia
8º. Giovanni Visconti (Ita) ISD
9º. Christopher Froome (GBr) Barloworld
10º. Robert Kiserlovski (Cro) Amica Chips - Knauf a 0.21

36º. Diego Alejandro Tamayo Martinez (Col) Carmiooro - A-Style a 1.45




Bole se impone a Baliani y Grivko.

viernes, 17 de abril de 2009

Sebas Tamayo sexto en la primera etapa de Cartagena


Excelente actuación de Sebas en la primera etapa de la Vuelta a Cartagena. Una jornada sin dificultades montañosas, pero con el viento como principal enemigo del pelotón que motivó que apenas cuarenta corredores se disputaran la victoria en las calles de Torrepacheco, tras 122 kilómetros de recorrido desde Cartagena. David Calatayud (Contentpolis), fue el más rápido de un grupo delantero del que parece, saldrá el vencedor final de esta vuelta, pues el siguiente paquete llegó a casi siete minutos.

De esta manera, Sebas se erige como la principal baza del CAI de cara a las aspiraciones de su equipo en la presente Vuelta a Cartagena. El siguiente “naranja” clasificado fue Joaquín Villalba “ El halcón de Saviñán” que se dejó poco más de ocho minutos en meta.
Calatayud se impone al sprint. Podemos apreciar a Sebas de naranja. Ojo! Que dice que no esprinta ... El de azul que hace tercero combina bien con Coca-Cola y un poco de hielo.

Clasificaciones
1º. CALATAYUD ASENSIO, David (CONTENTPOLIS – AMPO) 2:46:22
2º. ORTEGA GASCÓN, Joaquín (CCN - VALENCIA TERRA I MAR) m.t.
3º. WALKER, Johnnie (TRASMIERA) m.t.
4º. PÉREZ BURGUEROS, Francisco (TRASMIERA) m.t.
5º. GARCÍA NICOLÁS, Francisco (TRASMIERA) m.t.
6º. TAMAYO, Juan Sebastian (CAI) a 3”
7º. LECHUGA RODRÍGUEZ, Pablo (ANDALUCÍA – CAJASUR) a 3”
8º. LÓPEZ GONZÁLEZ, Francisco (ANDALUCÍA – CAJASUR) a 3”
9º. VARELA ARREGI, Kepa (BIDELAN – KIROLGI) a 3”
10º. CARRATALA MARTÍNEZ, José Luis (UPV – BANCAJA) a 3”

55º. VILLALBA TOBAJAS, Joaquin (CAI) a 08:15

Hoy se disputa la segunda etapa ALHAMA DE MURCIA - ALHAMA DE MURCIA de 132KMS con la ascensión a Collado Bermejo como principal dificultad.

Equipo CAI en Cartagena. A la derecha del todo, Sebas y "El halcón de Savíñán".

martes, 14 de abril de 2009

Semana Santa

Estos días hemos aprovechado el paréntesis competitivo para hacer alguna rutica pirenaica y algún entrenamiento disfrutando todos juntos. Vamos, lo que viene siendo, mayormente, Enjoy Cycling en estado puro.

El Tío de la Vara. ¡Ya me ha enganchau! ... "¡Sus bia crujir vivoooos!".


El Tío de la Vara y el Capitán Fanegas. A ver quién es más brutico de los dos.


Cambio de recorrido. Este año la Cicloturista de La Jacetania varía su recorrido clásico. Suponemos que los motivos tienen algo que ver con esta imagen. Estamos en la cima del Alto de Angelé.


Villa de Borau. Rubén "Carajillín" y Gerardo cruzando este pueblo que está a gran altitud. Ideal para hacer acopio de glóbulos morados.


Botellón. Con la llegada del buen tiempo, ya apetece reponer fuerzas al solecico. Vale más esto que una patada en ...

viernes, 10 de abril de 2009

Clasicómano

Allá por la ya lejana década de los ochenta, los medios de comunicación especializados en ciclismo eran más bien escasos. Las retransmisiones televisivas se limitaban a resúmenes vespertinos de las etapas de la Vuelta a España y poco más. La información gráfica y escrita no era mucho más pródiga. El que esto escribe, en su amanecer al mundo ciclista, escudriñaba en la sección polideportiva de los diarios de deportes en busca de referencias al que había decidido, no ha mucho, que iba a ser su deporte favorito. No negaré que mostrar cierta filia por una actividad minoritaria, entendiendo por minoritario todo aquello que no fuera perseguir un balón de cuero, confería cierta distinción en aquella época adolescente.


El hallazgo en los quioscos de una arcaica revista como “La Bici”, suponía un éxito en el afán por pasar páginas dedicadas exclusivamente al deporte velocipédico. Mas era una publicación semanal la que colmaba la necesidad de información ciclista del joven aficionado. Unas humildes hojas repletas de ciclismo profesional y aficionado, dirigida por un tal Chema Rodríguez y que se daban en llamar “El Ciclista” que a finales de la década, sufriría una amarillenta escisión de la que nacería “Meta 2 Mil”. Entre sus páginas descubrí, de la mano del inefable Jef Van Looy, el ignoto mundo de las clásicas. El periodista belga se esforzaba en explicar al inculto aficionado español la diferencia entre una “clásica”, una “kermese” o un “criterium”. Aclaraba una y otra vez como lo que aquí, en la “vueltómana” piel de toro, denominábamos “clásicas” (Ordizia, San Sebastián, …) no eran otra cosa que lo que en el resto de Europa se tenían por “kermeses”. Gracias a su avezada pluma, supe de la existencia de unas misteriosas carreras con nombres impronunciables (Kuurne-Bruselas-Kuurne, Het Volk, E3 Harelbeke, Gante-Wevelgem, …), otras con títulos tan gráficos como Flecha Walona o Flecha Brabançona, algunas cuya denominación suponía por si sola toda una clase de geografía europea (Burdeos-París, Lieja-Bastogne-Lieja, París-Bruselas, París-Roubaix, Blois-Montlhery o Blois-Chaville o Creteil-Chaville hoy llamada París-Tours, …) y que había un Tour que se corría en una sola etapa y los belgas flamencos veneraban bajo la advocación de De Ronde Van Vlaanderen.


El ínclito Van Looy se afanaba, año tras año, la semana previa a cada una de las grandes citas, en dar a conocer los pormenores orográficos, tácticos e históricos de estos monumentos del ciclismo.


Quizá fuera por él o por el afán de seguir siendo un seguidor de minorías que pese a vivir en plena “época periquista”, dirigí mi atención ciclista hacia este tipo de carreras, mientras anhelaba imposibles posters que ornamentaran las paredes de mi habitación con las efigies de héroes como Planckaert, Van der Poel, Kelly, Criquielion, Argentin, … o mi favorito Eric Vanderaerden.


Quizá no fue casualidad que mi primer ídolo patrio fuera un ciclista que dadas sus condiciones, nació veinte años antes de lo que debiera, que fue obligado a malgastar sus excepcionales características para las clásicas en el sempiterno intento por ganar una Vuelta a España y que sin duda, hubiera hecho historia en las más grandes carreras del Norte de Europa. Estoy hablando de un tal Pello Ruiz Cabestany.


En su día, recibí con alborozo el primer número de una incipiente publicación gráfica que sería un importante referente de la prensa ciclista escrita durante las siguientes décadas, “Ciclismo a Fondo”. La portada del mismo, glosaba el primer triunfo de Pedro Delgado en la Vuelta a España. Mas las fotos interiores del segoviano, “levantándole la cartera” a un menudo escocés con pendiente, no fueron las que más llamaron mi atención, sino las de un magnífico Eric Vanderaerden volcado sobre el manillar de su Raleigh, con los ojos hinchados tras soportar durante horas la inclemente y gélida lluvia, tocado con el maillot tricolor de campeón belga y apretando los dientes en pos de la victoria en la meta de Meerbeke, en una de las más épicas ediciones del Tour de Flandes.


Por suerte, merced a los éxitos de los corredores españoles en vueltas por etapas, los años posteriores evidenciaron un auge del ciclismo que posibilitó que tuviéramos acceso a retransmisiones de pruebas hasta entonces vetadas. Así, pudimos ser testigos directos de la eclosión de la quinta de los Tchmil, Museeuw, Tafi, Bartoli, Ballerini, Baldato, Van Petegem, Duclos-Lassalle, Vandenbroucke, Sorensen, …


Por todo lo anteriormente detallado, comprenderá el lector que estas fechas son mis preferidas del almanaque ciclista. Disfrutando de unas carreras que se miden por unos parámetros diferentes a los del resto del ciclismo por lo que a las vueltas por etapas se refiere. Experimentando la empatía que se crea cuando, tras el entrenamiento o paliza ciclista dominical, todavía con un latente dolor de patas que una apresurada ducha apenas ha podido mitigar, ves a esos superhéroes luchar agónicamente por mantener, recortar o aumentar rentas que se miden en metros y segundos, en el mejor de los casos, en una angosta calzada de la vetusta Europa Ciclista.


Seguir este tipo de ciclismo también marcaba tendencias en un globero en ciernes. No en vano, eran las únicas carreras en las que podías contemplar a los profesionales llevando chichonera que en aquella época, no tenían la obligación de lucir en competición, excepto en Bélgica. El “globerete clasicómano” salía en las carreras “a lo belga”, emulando a sus ídolos. Esto era, llevando la gorra o bien por debajo de la chichonera con la visera hacia delante o encima del citado elemento de seguridad con la visera hacia atrás. Me atrevería a decir que el hábito de llevar calcetines por encima de las zapatillas emanó de este tipo de carreras (Sean Kelly fue, sin duda, su más ferviente portador), pero lo que nadie puede negar es que la primera aparición de, las hoy manidas, piratas se dio en las clásicas, viniendo a mi memoria la imagen de un afamado Van Hooydonck portando aquella suerte de perneras que dejaban al aire sus espigadas canillas.

"A lo belga" con la visera para atrás. 07/09/1986. Trofeo Fiestas de Cariñena para cadetes. Detalle curioso: el zagal que aparece detrás, apretándose el calapié derecho, en la actualidad regenta un negocio ciclista en una Gran Vía de Zaragoza y en la imagen aparece haciendo publicidad de una tienda que hoy es competencia de la suya (C. Cabrera).


"A lo belga" con la visera para delante. 13/12/1987. Ciclocros en Zaragoza para juveniles. El ciclocros es una disciplina eminentemente clasicómana, por lo que las tendencias de los belgas también tienen buena acogida en la misma.


Tour de Flandes 1991. Edwing Van Hooydonck gana luciendo unas precursoras piratas.

El “globerete clasicómano” no desperdicia la oportunidad de imitar a sus iconos del profesionalismo para sentirse, de alguna manera, un poco como ellos y experimentar las mismas sensaciones. Así, busca con denuedo carreteras olvidadas, estrechas, rodeadas de campos de labor que recuerden a las ajadas vías de las ardenas flamencas. Permítame recomendarle al lector zaragozano, lugares como “El Lugarico” o la carretera del “Barrio del Comercio” en un día gris amenazante de lluvia. El hallazgo de algún tramo adoquinado se convierte en motivo de algarabía y emoción. Si bien este tipo de calzadas cada vez son más insólitas, me tomo la licencia de sugerirles la calle Don Jaime I para percibir lo más parecido al trajín de un tramo de pavés.




No quiero terminar estas líneas sin destacar una grandísima noticia para todos los amantes de las clásicas. Muy pronto en Zaragoza, gracias a la perseverancia de nuestro máximo edil, Juan Alberto Belloch, tendremos la oportunidad de imitar a los “profetis” en una guisa en la que les hemos visto infinidad de veces en una prueba tan carismática como los Tres Días de La Panne. ¿Quién no ha tenido la sana envidia de emular a nuestros ídolos saltando con sus bicis evitando los raíles de los tranvías de las localidades del Norte de Europa?. Pues muy pronto, merced al caprichico de nuestro insigne alcalde, tendremos la oportunidad de hacer lo propio por las calles de nuestra querida Caesaraugusta.