Este
año que está a punto de finalizar nos ha dejado no pocas improntas en nuestra memoria
deportiva. La mayoría, por no decir
todas, buenas. Sin duda, hemos hecho honor al lema de nuestro patrocinador
principal y hemos llevado a gala su axioma Enjoy Cycling. Algunos han
desplegado sus barucas en carrericas de pueblo de la otrora denominada categoría
de veteranos, mientras algún otro se ha codeado con la élite de su especialidad
favorita. Este es el caso de nuestro amigo Adrián, para el que esta añada ha
supuesto un paso adelante en su rendimiento agonístico y la consolidación entre
los mejores de su disciplina. Paro los lectores profanos, cabe señalar que Adri
se dedica a eso del triatlón. Es decir, una suerte de compendio de diferentes
especialidades deportivas que comprende el noble arte de ir en bici, la
sospechosa costumbre de salir corriendo y el higiénico hábito de bañarse.
Pues bien, si ya podría darse por
buena la temporada 2013 con la consecución del Campeonato de Castilla y León de
triatlón por relevos, el tercer puesto en la Copa España en la modalidad 600
Sprint supone la guinda a una campaña para enmarcar en la que nuestro amigo ha
evidenciado una destacable regularidad manteniendo a lo largo de la misma un
gran nivel. Su tercer puesto en la TriWhite CUP, cinco de cuyas seis pruebas puntuaban
para el Ranking 600 de la FETRI, ha catapultado a Adri al podio. Seis pruebas
que le han obligado a mantener un óptimo estado de forma durante siete meses.
Desde el siete de abril en Pilar de la Horadada (Alicante), siguiendo con las
pruebas de Alicante, El Puerto de Santa María (Cádiz), Carboneras (Almería),
Benidorm hasta la última el pasado 20 de octubre en San Javier (Murcia). Un
gran esfuerzo que ha llevado al límite a su cuerpo en alguna ocasión, pero que
ha merecido la pena. Sin duda, las lecciones carajilliles sobre técnica
ciclista han servido para ganar enteros en sus opciones, por lo menos en el
segmento velocipédico.