

El Carajillo Alegre no quiso perderse la mayoría de edad de esta prueba perteneciente a la otrora prolífica Copa Lleida. Un circuito jalonado con un duro repecho que hacía las veces de recta de meta, nos esperaba en una calurosa tarde. Allí se dirigieron los inefables Gerardo, Rubén “Carajillín” y Felis. El flamante Audi de Gerardo tuvo a bien imponer un mínimo de cordura e impidió que su propietario llegase a la carrera. De tal manera que sólo dos carajillos iban a defender el pabellón carajillil.
Los más afamados seguidores de El Carajillo Alegre no habrán pasado por alto un nimio detalle. Efectivamente: las cinco de la tarde, un calor, plaza de toros de ... mi pobre “Carajillín” ... ¿A quién se le ocurre engañar a Rubén para correr una carrera por la tarde?. Bueno, la cosa no fue a mayores y este toro sólo le propinó un revolcón (una vuelta perdida) y poco más.
No obstante, El Carajillo Alegre os presenta una serie de fotos, cortesía de nuestro fotógrafo oficial José Manuel Carrillo, para que se puede constatar la diferencia entre Rubén “Carajillín” y Felis o, lo que es lo mismo, entre la clase y la miseria:




Fotos: José Manuel Carrillo