Aquella máxima que reza que una carrera no se gana hasta que no se cruza la última línea de meta, sin duda, estará muy presente en la mente de Boris Shpilevsky después de la recién finalizada edición del Tour de Hainan. El ruso que ha corrido esta temporada en las filas del Fuji-Servetto, saboreaba las mieles del triunfo en la clasificación general, aderezado con la victoria en la última etapa, cuando los jueces le informaron de la sanción, consistente en dos minutos de penalización, por aceptar la rueda de un compañero tras sufrir un pinchazo. De esta manera, el segundo clasificado en la etapa y en la general, Fran Ventoso (Carmiooro-A Style), pasaba a adjudicarse ambos hitos y ornamentar con un broche de oro esta exitosa temporada para sus intereses individuales y colectivos.
Recién finalizada la etapa, Boris Shpilevsky es ajeno a la penalización que le hará perder el parcial y la general.
Nuestro amigo, el carajillo Diego, finalizó en la 48ª plaza de la clasificación final, tras realizar un denodado trabajo a favor de los líderes de su formación, el citado Fran Ventoso y el italiano Daniele Colli que finalizó en la sexta plaza. Finalmente, Fran Ventoso acabó segundo en la clasificación por puntos y Carmiooro-A Style tercero en la de equipos.
Diego y sus compañeros de Carmiooro-A Style asisten a la ceremonia del podium que va a encumbrar a su colega Ventoso.
Shpilevsky sube a recojer el maillot de la regularidad.
Ventoso recibe la felicitación de otro participante.
Tras el esfuerzo de estos nueve días, llega la hora de la relajación y el turismo. Diego y Ventoso al más puro estilo "guiri".
Dieguechu de compras por China.