Habida cuenta de que desde un tiempo para esta parte estamos, dicen, sumergidos en un “ciclismo de dos velocidades”, se imponen varias alternativas a dicha tendencia. Unos prefirieron en su día “borrarse” del juego, otros sobrevivir con la mayor dignidad ajenos a resultados y oropeles reservados a la élite imperante, algunos adaptarse al cambio jugando con las mismas armas que éstos. Bien podría encuadrarse en esta última tendencia la decisión que han abanderado dos ilustres carajillos. Gerardo y Rubén, “hartos de ver a algún que otro rival participando en carreras de bicicletas en moto”, palabras textuales, han decidido llevar al extremo aquello de que “si no puedes con tu enemigo, únete a él” y ni cortos, ni perezosos se han pasado al mundo de las dos ruedas …motorizadas.
Como lo oyen. Los dos buques insignia de El Carajillo Alegre master han tomado la decisión de colgar la bicicleta, para pasarse al mundo de las motos. Es más, están intentando, por ahora sin éxito aparente, que otros carajillos les emulen en dicha diáspora, en un afán de que El Carajillo Alegre pase a ser un grupo de moteros, en lugar de una cuadrilla de bicicleteros.
Como quiera que el resto de carajillos todavía nos consideramos, con mayor o menor fortuna, ciclistas y que no es nuestra intención pasarnos al mundillo de las motos, desde El Carajillo Alegre lamentamos estas dos sensibles bajas y les deseamos la mejor de las suertes en esta nueva aventura que deseamos les proporcione la felicidad que se merecen. Todo en esta vida tiene fecha de caducidad. Por ese motivo Gerardo y Rubén han finalizado un ciclo en El Carajillo Alegre, pero saben que aquí tiene un grupo de amigos para lo que necesiten … mientras no sea dinero.