Como quiera que estamos en plena canícula y a la orilla del Ebro los rigores estivales se soportan a duras penas, los carajillos más aventureros y predispuestos al difícil arte de la competición master, decidieron emigrar a tierras del norte con el fin de esquivar, en la medida de lo posible, la lacerante presencia de Helios. Así que la cosa era irse bien lejos y Ordizia no está, precisamente, a un paso de la Plaza del Pilar. A medida que la expedición carajillil se aproximaba a los otrora dominios de los vascones, el cielo se tornaba plúmbeo, lo cual, les llenaba de regocijo ante las expectativas de competir ajenos al sofocante calor que dejaban tras de sí. Mas, cuando las plomizas boiras comenzaron a descargar el líquido elemento que albergaban en sus entrañas, ya en tierras de los várdulos, la sonrisa de los carajillos se convirtió en una mueca de circunstancias que venía a significar algo así como “maldita la gracia que nos hace ponernos como sopas”. Tuvieron a bien las boiras guiputxis dar una tregua y, finalmente, los peores augurios no se cumplieron, disputándose la Ordiziako Lehen Master Saria ajena a la lluvia y en un fresquito ambiente, eso sí.
Entre las muchas peculiaridades que a buen seguro, posee Ordizia, nos interesa destacar en este relato la proximidad al Alto de Abaltzisketa. Este aspecto, sin duda, sirvió de escusa para visitarlo en dos ocasiones durante el recorrido de la carrera que nos ocupa. Convirtiose, por ello, en el juez de la prueba, pues la meta distaba de la cima apenas diez kilómetros, todos ellos descendentes.
Entre las muchas peculiaridades que a buen seguro, posee Ordizia, nos interesa destacar en este relato la proximidad al Alto de Abaltzisketa. Este aspecto, sin duda, sirvió de escusa para visitarlo en dos ocasiones durante el recorrido de la carrera que nos ocupa. Convirtiose, por ello, en el juez de la prueba, pues la meta distaba de la cima apenas diez kilómetros, todos ellos descendentes.
Alberto "Mochuelo" y Felis "Gritón" calentando en los instantes previos a la carrera.
Preparados, listos, ... ¡Ya!.
Primero de los tres pasos por las inmediaciones de Ordizia, antes de ascender por primera vez Abaltzisketa. Felis comandando el grupo principal.
Alberto "Mochuelo" rodando en la parte noble de la carrera.
La carrera se empieza a seleccionar tras la primera ascensión.
Felis llegando a meta.
Podio Master-40. Txemi, Felis y Augusto.
Otra localidad próxima a Ordizia es Idiazabal. Famosa por sus quesos. Aprovechamos para hacer acopio del típico producto y, de paso, tomar un tentempié. Dado el tamaño de los bocadillos que nos sirvieron, los supositorios preferimos comprarlos en Zaragoza.